Un día después del segundo debate presidencial, Xóchitl Gálvez, candidata de la oposición, proclamó su indiscutible victoria en el evento y refutó las afirmaciones de que la elección ya está decidida, una narrativa promovida por su rival, Claudia Sheinbaum.
«Ellos quieren hacer creer que ya tienen la victoria asegurada, que el asunto está resuelto. Pero no, ayer se les quemó el arroz y ahora tendrán que empezar de nuevo», declaró Gálvez en una transmisión en vivo desde su cocina, rodeada de su equipo de jóvenes colaboradores.
La candidata del PAN, PRI y PRD señaló que, según los datos en su poder, la contienda estaba muy reñida antes del debate, con una diferencia de solo cinco puntos. «Creo que después del debate, fácilmente podríamos estar empatados», afirmó.
Gálvez también reiteró su confianza en haber sido la ganadora del debate en los Estudios Churubusco, destacando su audacia, asertividad y su capacidad de hablar sobre la realidad del país. «Estoy segura de que ganamos el debate. No solo fui audaz y asertiva, sino que hablé de la verdadera situación del país. Claudia no pudo responder adecuadamente, especialmente en temas como la extorsión», comentó.
Finalmente, sobre su elección de vestimenta, Gálvez mencionó sentirse mucho más cómoda en la ropa que usualmente usa, en contraste con el traje sastre que llevó en el primer debate. «Me sentí completamente yo, y sinceramente nunca estuve tan contenta como con el traje del primer debate», concluyó.
