Tensión Diplomática: La Unión Europea Condena el Asalto a la Embajada Mexicana en Ecuador

La Unión Europea expresó su firme condena ante el asalto a la embajada de México en Ecuador, llevado a cabo con el objetivo de detener al exvicepresidente Jorge Glas, quien se encontraba asilado en dicha misión diplomática. Este acontecimiento fue calificado por el portavoz de la UE como una violación a los principios fundamentales de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961, enfatizando la trascendencia de proteger la integridad de las misiones diplomáticas y su personal para el mantenimiento de la estabilidad y el orden internacional.

La UE subrayó la importancia de preservar la inviolabilidad de las sedes diplomáticas, declarando inaceptable cualquier infracción a este principio, según lo estipulado por la Convención de Viena. Este pronunciamiento llega tras el incidente en el cual efectivos ecuatorianos ingresaron a la embajada de México en Quito para arrestar a Glas, lo que ha desencadenado una crisis diplomática entre México y Ecuador.

José Manuel Albares, Ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación de España, describió la incursión como un acto «muy grave», y reafirmó el compromiso de España con el respeto al derecho internacional y la promoción de relaciones armónicas entre las naciones de América Latina.

La irrupción en la embajada mexicana ha provocado una respuesta inmediata por parte de México, anunciando la ruptura de relaciones diplomáticas con Ecuador y la evacuación de su personal de dicho país. España, por su parte, se ha sumado a las voces que denuncian este acto como una transgresión a los acuerdos internacionales vigentes.

Jorge Glas, quien se desempeñó como vicepresidente de Ecuador de 2013 a 2018 y es acusado de corrupción, buscaba refugio en la embajada mexicana alegando persecución judicial. La justificación del asalto por parte de la canciller ecuatoriana Gabriela Sommerfeld, basada en un presunto riesgo de fuga de Glas, ha intensificado aún más la situación, poniendo en relieve los desafíos en el respeto a las normativas diplomáticas internacionales.