Dirigentes y senadores de los partidos PAN y PRD han manifestado su rechazo a la orden del presidente de militarizar la distribución de ayuda a los damnificados por el huracán Otis en Guerrero. Se alega que esta medida, similar a la aplicada con las vacunas contra el COVID, tiene un trasfondo político.
El líder nacional del PAN, Marko Cortés, calificó como sorprendente la decisión de que el ejército controle el acceso de camiones con ayuda humanitaria, exigiendo que se permita el envío de apoyo a través de otras vías, sin necesidad de que el gobierno sea el intermediario.
Cortés añadió: «Al igual que con las vacunas, parecen buscar monopolizar la distribución de la ayuda con fines políticos en medio de la tragedia. Ojalá al menos lo hagan de manera efectiva.»
Por su parte, la secretaria general del PRD, Adriana Díaz Contreras, lamentó la medida presidencial y señaló la falta de apoyo de los representantes de Morena en Guerrero y otros estados. Subrayó la importancia de la solidaridad en momentos de crisis, advirtiendo que la población recordará quiénes les dieron la espalda.
El coordinador del PAN en el Senado, Julen Rementería, criticó al presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien calificó de soberbio, indolente y mezquino por restringir la distribución de ayuda a través de las Fuerzas Armadas. Rementería destacó la importancia de la cooperación de todas las autoridades y organizaciones para atender las necesidades de los damnificados en Acapulco y proporcionarles alimentos, agua, ropa y calzado.
