La ministra Lenia Batres Guadarrama ha desmentido las acusaciones de una denuncia anónima que la implicaba en presiones para la selección del personal de su ponencia, incluyendo al coordinador Netzaí Sandoval. «Nadie me ha presionado; habría ignorado cualquier intento de presión», afirmó Batres Guadarrama. La denuncia, que se filtró durante el período electoral, ha sido objeto de una investigación ordenada por la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, en contra del ministro retirado Arturo Zaldívar y antiguos colaboradores.
Batres Guadarrama ha expresado su descontento por la publicación de la denuncia y su proceso admisorio durante la etapa electoral, señalando que tal acto es ilegal y compromete la integridad del procedimiento judicial. «La Suprema Corte no debe inclinarse por intereses partidistas ni estar al servicio de campañas electorales», enfatizó.
La ministra criticó recientemente la decisión de tres colegas de la Segunda Sala de la SCJN que votaron en contra de su proyecto para negar un amparo al ex delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), José Luis Alarcón Ezeta, acusado de ocultar millones en su declaración patrimonial y vinculado a irregularidades en obras públicas que resultaron en fatalidades.