La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Banco de México anunciaron la renovación, por dos años más, de la Línea de Crédito Flexible (LCF) con el Fondo Monetario Internacional (FMI), por un monto de 35 mil millones de dólares. Este instrumento, de carácter precautorio, fortalece las reservas de activos internacionales de México, brindando una red de seguridad ante condiciones externas adversas y preservando la estabilidad económica. La decisión del FMI resalta la solidez de las políticas macroeconómicas, el marco institucional y el compromiso de México con la estabilidad financiera.
En entrevista con Luis Cárdenas, Pedro Tello, consultor en economía, destacó la importancia de esta renovación, subrayando que el FMI solo otorga este tipo de líneas de crédito a países con sólidos indicadores económicos y políticas institucionales eficientes. Tello enfatizó que, en un año marcado por el proceso electoral, esta línea de crédito, junto con otros instrumentos, actúa como un blindaje para enfrentar posibles desafíos económicos durante el último año del gobierno.
En este contexto, Pedro Tello resaltó que la renovación de la Línea de Crédito Flexible no solo fortalece las reservas internacionales de México, sino que también actúa como una señal de confianza por parte del FMI en las políticas económicas implementadas. Destacó que la solidez del marco institucional mexicano, el compromiso con la estabilidad económica y la reducción del acceso a la LCF, en línea con la situación actual del país, son elementos clave que refuerzan la percepción positiva ante los mercados internacionales y los inversionistas. Esta medida, según Tello, contribuirá a mitigar riesgos y a mantener un entorno financiero robusto en el futuro cercano.
