El gobierno mexicano ha decretado la expropiación permanente y ocupación definitiva de una planta de hidrógeno operada por la empresa francesa Air Liquide, situada en la refinería de Tula, Hidalgo, perteneciente a la petrolera estatal Pemex. El decreto fue publicado en el diario oficial este jueves.
Originalmente, en diciembre, se anunció una ocupación temporal de la Planta Productora de Hidrógeno U-3400 por razones de utilidad pública, bajo la administración de Pemex Transformación Industrial (PMI). El reciente decreto establece la «ejecución inmediata» de la expropiación, según informa la presidencia. Hasta el momento, Air Liquide, con oficinas centrales en París, no ha emitido comentarios al respecto.
En febrero, tras la ocupación temporal, el gobierno procedió a formalizar la expropiación mediante una declaratoria de utilidad pública, instruyendo a PMI a iniciar el correspondiente procedimiento con la Secretaría de Energía. El decreto también aclara que cualquier acción legal emprendida por la empresa no detendrá la implementación de esta medida. Además, establece que PMI deberá compensar económicamente a la empresa francesa, aunque no especifica el monto.
El documento también menciona que, tras ser notificados, los interesados tendrán un plazo de 10 días hábiles para iniciar procedimientos judiciales que únicamente podrán disputar la cuantía de la compensación, conforme a lo estipulado en el artículo 11 de la Ley de Expropiación.
Esta acción forma parte de la estrategia del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para lograr la autosuficiencia energética, destacando la importancia crítica del hidrógeno en la producción de combustibles en la refinería de Tula, y cómo la dependencia de un proveedor externo representaba un riesgo para la seguridad energética nacional.
