Atlético de Madrid y FC Barcelona están cerca de intercambiar jugadores: Griezmann y Saúl. Por un lado, la situación del Barcelona para poder inscribir de nuevo a Messi y a los nuevos fichajes, le obliga a poner en el escaparate algunas de sus piezas más golosas. Y por otro, la postura de un Saúl que parece decidido a salir del Atlético. Un escenario perfecto para saber encontrar resquicios en este mercado tan extraño. Parece que ambos clubs lo tienen claro.
No solo es una cuestión económica, Griezmann, pese a tener un buen rendimiento la temporada pasada, ha visto como este verano el Barcelona incorporaba dos futbolistas que podrían desenvolverse en posiciones similares a la suya: Agüero y Depay. Uno, íntimo amigo de Messi, el otro una petición expresa de Koeman. Se le cierran las puertas del conjunto culé al azulgrana. El Barcelona, que ha llegado a un acuerdo con Messi para ampliar su contrato finalizado el pasado 30 de junio, necesita encontrar destino a uno de los futbolistas que mayor espacio salarial liberaría.
El Atlético de Madrid tiene muco tiempo pensando el caso de Saúl. Casi dos meses después de los primeros rumores sobre su posible salida, el canterano seguía sin recibir ofertas que satisficiesen al club. De golpe, se abrió la vía azulgrana tras intentar los culés la misma operación, pero con Joao Félix como pieza de cambio. La búsqueda de un centrocampista que pudiese llenar el vacío que dejó Wijnaldum sin haber llegado siquiera a vestir la camiseta azulgrana juega a favor del perfil de Saúl. Un todocampista que con 26 años puede volver a recuperar el nivel que tiene en sus piernas y que encajaría en las peticiones de Koeman.

Un intercambio necesario para todos
A nivel deportivo parece que ambos clubs saldrían ganando. Uno obtendría un delantero de primer nivel en una operación imposible de afrontar de otra manera. El otro liberaría espacio para Messi y los nuevos fichajes y añadiría un jugador a su centro del campo diferente a los que ya tiene y con un gran margen de mejora si vuelve por sus fueros. Mientras los clubs avanzan en una negociación que podría estar cerca de concretarse, llegaría el turno de los futbolistas. El Atlético necesitaría que Griezmann realizase una considerable bajada de su salario para poder encajar en las cifras que se manejan ahora en el club colchonero y el Barcelona necesitaría que Saúl aceptase la posibilidad de no ser titular indiscutible.
El francés, pese a no contar con el beneplácito de la afición, tendría el visto bueno de Simeone, su gran valedor, y del capitán Koke, uno de sus grandes amigos en el vestuario rojiblanco. De producirse su llegada, el Atlético podría abandonar la idea de acudir al mercado en busca de un delantero suplente para Suárez y fiarlo todo al uruguayo, Griezmann, Correa y Joao Félix. Saúl por su parte, tendría ante sí la oportunidad de jugar en un equipo de primer nivel en el que podría recuperar su mejor versión una vez dejé atrás las últimas temporadas.