El gobierno de Francia anunció que, a partir del 9 de julio, los bares y discotecas podrán operar con normalidad, además, ya no será obligatorio el uso de cubrebocas, siempre y cuando los ciudadanos presenten una prueba negativa de covid-19 o bien el certificado de vacunación.
Cabe señalar que el aforo permitido será únicamente del 75 por ciento en interiores y cien por ciento en exteriores.
La decisión se tomó tras una reunión en el Palacio del Elíseo entre el presidente francés, Emmanuel Macron, y representantes del sector del ocio nocturno, que urgían una reapertura de los locales tras 15 meses de cierre.
De acuerdo con datos oficiales, en Francia han cerrado cerca de mil 600 discotecas, mientras que un 25 por ciento presenta problemas para cumplir con el protocolo sanitario.
También los conciertos regresarán el próximo 30 de junio, pero tendrán que ser al aire libre y de igual manera tendrán que presentar un certificado de vacunación o una prueba negativa de covid-19.