«Formentera»: el paraíso a llegar, según Metric

Escúchala como en la Primera Emisión de MVS Noticias con Luis Cárdenas

“Formentera”, una isla hermosa en medio del Mar Mediterráneo. Arena y sol perfectos para unas vacaciones permanentes, con atardeceres de postal. Un lugar al que nunca fueron los integrantes de Metric, pero que idealizaron como el paraíso al que, ojalá, todos podamos llegar luego de estos tiempos tan turbulentos.

La pandemia paró al mundo por completo. Llenó de angustia y tristeza a muchos. Nos recordó la fragilidad de la vida y el valor de algo tan simple como respirar. Durante estos dos años, la banda canadiense de indie, Metric, tomó ese tiempo para recluirse y reflexionar sobre qué sucedía con ellos y su alrededor.

Como una Odisea, Metric nos lleva por un viaje de 9 canciones, que atraviesa aguas de tormenta para llegar a un Paraíso perdido. Muestra de ello es la casi epopeya de 10 minutos, “Doomscroller”. Iniciamos el viaje entrando directo en el abismo hacia el infierno. Un sintetizador oscuro nos adentra dentro de una cueva húmeda que poco a poco desciende, hasta que en el fondo aparecen luces rojas y azules que truenan con distorsión. Llegamos al infierno. Pero la voz de Emily Haines, nos grita “No te rindas aún, no te rindas ahora”. Pasaremos esta prueba. Con una cadencia de ayuda celestial de piano y voz, contra una batalla de rave infernal, logramos salir y terminamos abatidos en medio de una costa desconocida.

Cada canción es una metáfora de la situación global y del sentir de las personas, disfrazadas en canciones de amor y pérdida. Por ejemplo, volvamos a esa costa. Justo en la canción que da nombre al álbum, “Formentera”, Emily habla sobre cómo alcanzar una mayor libertad, más allá de todo lo que sabe y conoce, y la playa de aquella isla es donde quiere estar, apacible como los violines que acompañan su lamento. Un lugar para ser libres tras años de encierro por una pandemia.

En “What feels like eternity”, la cuarentena sigue presente. La describe de forma literal, con guitarras y sintetizadores llenos de ansiedad por romper esa eternidad contenida. Mientras que Emily canta con una angustia conformista que admite cómo la sobrepasa.

Sin embargo, los canadienses también nos regalan motivación para seguir adelante. En “I Will Never Settle”, con un ritmo más optimista, habla de una chica que no se dará por vencida hasta que se escuche su sentir, pues un mundo conformista y orgulloso puede romper un alma.

Metric, ya con 20 años de carrera, ha establecido un estilo específico, que combina la electrónica con el indie rock, que le permite mantenerse fresco sin sacrificar la experimentación, tanto en sonido como en ideología. Justo en esa debacle entre sonidos oscuros y alegres, cada oyente puede sentir que hablan de su historia; puede cantar, brincar y corear junto a Emily.

Por último en “All Comes Crashing”, entre un mezcla de teclados ambientales y riffs de guitarra, Metric resume su mayor deseo para todos nosotros en estos tiempos de crisis: El mundo podrá chocar, destruirse, incendiarse, explotar en mil pedazos. No importa que sea la última noche, si estás al lado de quien amas. Juntos, seguro, llegarán a Formentera.

TRACKLIST

  1. Doomscroller
  2. All Comes Crashing
  3. What Feels Like Eternity
  4. Formentera
  5. Enemies of the Ocean
  6. I Will Never Settle
  7. False Dichotomy
  8. Oh Please
  9. Paths in the Sky