La Federación confirmó que Franz Beckenbauer falleció el domingo en Munich, sin revelar la causa de su muerte. Beckenbauer, reconocido como uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos, nació el 11 de septiembre de 1945 en la misma ciudad.
El legendario «Káiser» Beckenbauer logró el éxito tanto como jugador como entrenador. Ganó dos Copas del Mundo, una como jugador en 1974 y otra como director técnico del equipo de Alemania Occidental en 1990. Su destacada actuación en la final de 1974, que tuvo lugar en su ciudad natal contra Países Bajos, fue una fuente de inspiración para su equipo en la victoria por 2-1 sobre el «fútbol total» holandés.
Beckenbauer disputó 103 partidos internacionales con Alemania y fue capitán en 50 de ellos. También lideró con éxito la candidatura de Alemania para organizar la Copa Mundial de 2006.
Además de su éxito en la selección, Beckenbauer jugó para el Bayern de Múnich de 1965 a 1977, donde también sirvió como presidente del club. Era conocido por su estilo como defensa ofensivo, transformando el papel de líbero en el fútbol.
Después de su etapa en el Bayern de Múnich, Beckenbauer jugó dos temporadas en Estados Unidos con el Cosmos de Nueva York, donde ganó la «Soccer Bowl» en tres ocasiones y compartió el terreno de juego con la leyenda brasileña Pelé.
La noticia de su fallecimiento generó un gran impacto en el mundo del fútbol, con mensajes de condolencia y admiración de figuras y organizaciones deportivas de todo el mundo. La Bundesliga lo describió como «un verdadero ícono», mientras que la UEFA destacó su contribución al fútbol europeo. La Premier League lo elogió como un jugador «tan elegante como dominante». El exinternacional inglés Gary Lineker expresó su tristeza por la pérdida de «uno de los grandes absolutos de nuestro fútbol».
