Este domingo, Estados Unidos tomó el control del tráfico aéreo en el aeropuerto de Kabul, con la finalidad de facilitar sus evacuaciones.
“Las fuerzas estadounidenses han asumido ya las responsabilidades del control de tráfico aéreo en el aeropuerto, con la ayuda de aliados afganos”, indicó a EFE John Kirby, portavoz del Pentágono.
Además, indicó que el tráfico de aviones comerciales desde ese aeropuerto continúa a pesar de haber experimentado algunas interrupciones y retrasos esporádicos.
Poco antes, a través de un comunicado conjunto, el Pentágono y el Departamento de Estado habían indicado que tomarían una serie de medidas para asegurar la seguridad del aeropuerto internacional de Kabul, y “permitir la salida segura del personal estadounidense y de sus aliados de Afganistán, en aviones civiles y militares”.
«A lo largo de las próximas 48 horas, habremos expandido nuestra presencia de seguridad a casi 6 mil tropas, con una misión centrada únicamente en facilitar estos esfuerzos, y tomaremos las riendas del control de tráfico aéreo en el aeropuerto”, señalaron en el comunicado.
Posteriormente, John Kirby detalló que Estados Unidos ya ha desalojado a cientos de civiles, personal de su embajada y ciudadanos estadounidenses que estaban en Afganistán.
Asimismo, confirmó que el Pentágono autorizó este domingo el envío de mil soldados a Kabul para reforzar esta operación, por lo que en un plazo de 48 horas habrá aproximadamente seis mil militares estadounidenses en el aeropuerto de la capital afgana.
Hace semanas, el gobierno estadounidense prometió que, antes de que acabara agosto y completara su retirada militar de Afganistán, ayudaría a evacuar del país a hasta 70 mil ciudadanos afganos, entre intérpretes y otros trabajadores, junto a sus familiares, que ayudaron a sus tropas durante la guerra.
Debido a que el proceso para obtener el visado es complejo y puede durar años, el país norteamericano ha negociado con países como Qatar y Kuwait, para que acojan temporalmente a esos refugiados.
Este domingo, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, señaló a la cadena CNN que también buscarán ayudar a evacuar a otros afganos que no cualifican para obtener visados especiales pero que apoyaron a su personal, y ahora pueden enfrentar amenazas de los talibanes. La rápida caída de Kabul en manos de los insurgentes ha complicado esta operación de evacuación, especialmente para aquellos que tienen dificultades para llegar a la capital afgana.
Con información de Latinus.
