La fiscal adjunta estadounidense Lisa Mónaco y el secretario general de Estonia, Tõnis Saar, han suscrito un acuerdo para la utilización de los «fondos confiscados de los crímenes rusos» en beneficio de Ucrania. Este acuerdo implica la transferencia de casi 500 mil dólares por parte de Estados Unidos a Estonia, quien a su vez canalizará estos fondos hacia Ucrania.
Mónaco destacó que el dinero fue decomisado por el Grupo de Trabajo KleptoCapture del Departamento de Justicia de Estados Unidos, proveniente de una red dedicada a adquisiciones ilícitas que exportaba herramientas de alta precisión desde Estados Unidos. Estas herramientas tenían como destino Rusia, con el propósito de contribuir al desarrollo de armas peligrosas para actividades de defensa y proliferación nuclear, pero fueron interceptadas en el intento.
Debido a restricciones legales, las autoridades estadounidenses no pueden transferir directamente los fondos a Ucrania, por lo que se ha acordado que Estonia actúe como intermediario en esta transacción. Mónaco explicó que el Grupo KleptoCapture se formó poco después de la invasión de Rusia a Ucrania, con el objetivo de perseguir las ganancias ilícitas relacionadas con el apoyo a la maquinaria de guerra rusa.
En relación con la incautación de la maquinaria y la confiscación de los fondos, la Fiscalía ha acusado a seis personas por violaciones al control de exportaciones y delitos de lavado de dinero. Además, un ciudadano de Letonia recientemente se declaró culpable de estos cargos en un tribunal federal de Estados Unidos.
El acuerdo establece que Estonia utilizará los fondos transferidos para llevar a cabo un proyecto destinado a evaluar de manera más rápida y eficiente los daños causados a los sistemas eléctricos de transmisión y distribución en Ucrania.
Mónaco resaltó que el Grupo KleptoCapture ha detenido a varios «facilitadores» de la agresión rusa y ha iniciado acciones de decomiso de cientos de millones de dólares vinculados a oligarcas rusos y otras redes de adquisiciones ilícitas. Enfatizó que los esfuerzos para hacer frente a Rusia requieren una asociación global, y este acuerdo representa una acción concreta en ese sentido.