Han pasado más de cuatro días desde que Lorenza Cano Flores, madre buscadora y miembro del colectivo Salamanca Unidos Buscando Desaparecidos, fue secuestrada en su hogar en Salamanca, Guanajuato.
Trágicamente, hombres armados asesinaron a su esposo e hijo antes de llevársela a la fuerza. Guanajuato, que alguna vez fue conocido por su belleza turística, ahora se ve eclipsado por la violencia generada por disputas entre carteles de la droga. El estado registró 3,104 homicidios dolosos en 2023, siendo el más violento del país.
La desaparición de Lorenza Cano destaca la creciente peligrosidad para quienes buscan a sus seres queridos, siendo cinco personas buscadoras asesinadas en Guanajuato desde 2020. Amnistía Internacional se une a la exigencia de encontrar a Lorenza, resaltando que en México «No es Normal» que las buscadoras sufran esta violencia.