Durante su intervención ante la Asamblea General de la ONU el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que su país no está buscando una nueva Guerra Fría con China.
En el evento, Biden prometió trabajar para promover la democracia y las alianzas, a pesar de la fricción con Europa por la pérdida de un multimillonario contrato que tenía Francia para la compra de submarinos.
La administración Biden ve a China como autoritaria y en ascenso como el primer reto del siglo XXI, pero, en su debut en la ONU, el mandatario dejó en claro que no estaba tratando de sembrar divisiones.
En otros temas, el mandatario reiteró el «incuestionable» compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel, al tiempo que abogó por un Estado palestino soberano.