El diputado Alejandro Moreno, líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), ha puesto en el centro del debate la creciente preocupación por la seguridad nacional y el combate al crimen organizado, señalando que estos temas son cruciales ante un panorama donde, a su juicio, «el país se derrumba» bajo la actual administración federal.
Durante una sesión en la Cámara de Diputados, Moreno argumentó que la atención del gobierno debería concentrarse en estas áreas críticas, en lugar de promover reformas que, desde su perspectiva, buscan desviar la atención de los verdaderos problemas que enfrenta México.
Moreno expresó su preocupación por la violencia y la inseguridad que azotan a estados como Zacatecas, Guerrero, Sonora y Sinaloa, criticando las propuestas recientes del presidente Andrés Manuel López Obrador, presentadas el 5 de febrero, como meros distractores de estos graves asuntos. El líder del PRI acusó al gobierno de López Obrador de tener vínculos con el crimen organizado, sugiriendo la existencia de un «narco-gobierno».
Además, el diputado advirtió sobre los esfuerzos de la oposición para combatir la llamada Ley Antiamparo, impulsada por el partido Morena, la cual, según Moreno, amenaza la autonomía de uno de los poderes de la nación. A pesar de reconocer que Morena tiene los votos necesarios para aprobar dicha ley en la Cámara de Diputados, Moreno aseguró que la oposición recurrirá a todos los medios legales y jurídicos disponibles para impugnarla.
En lo que respecta a las reformas constitucionales, especialmente aquellas relacionadas con el Poder Judicial y la materia electoral, Moreno se mostró confiado en que no prosperarán debido a que Morena y sus aliados no cuentan con la mayoría calificada requerida para su aprobación. Esta declaración subraya la firme postura de la oposición frente a lo que consideran intentos del oficialismo por modificar el marco legal y constitucional del país en beneficio propio, manteniendo el foco en la urgente necesidad de abordar los problemas de seguridad y violencia que, según ellos, se han intensificado durante el gobierno de López Obrador.