Greenpeace México ha levantado la voz ante la creciente problemática de la basura electoral en el país. En una entrevista exclusiva con Aleira Lara Galicia, directora de campañas de Greenpeace México, se expuso cómo la sobrecarga de propaganda política genera un impacto negativo en el medio ambiente y la salud pública. Con más de 25,000 toneladas estimadas de basura electoral solo en la Ciudad de México, la organización busca llamar la atención sobre la urgencia de regular y prohibir esta práctica que contamina calles, espacios urbanos y ecosistemas.

En un contexto donde los partidos políticos desacatan la ley que regula la colocación de propaganda electoral, Greenpeace ha emprendido acciones directas para visibilizar esta problemática. Voluntarios de la organización recolectaron basura electoral en puntos estratégicos de la Ciudad de México, evidenciando la falta de responsabilidad ambiental de los partidos políticos. La demanda de transparencia sobre los materiales utilizados en la propaganda y un plan de reciclaje efectivo son algunas de las propuestas que Greenpeace exige a los partidos políticos para mitigar el impacto ambiental de la campaña electoral.

Greenpeace insta a la ciudadanía a estar informada y exigir medidas concretas para reducir la huella ambiental de las elecciones. Es fundamental que los líderes políticos tomen acciones responsables y se comprometan con la protección del medio ambiente, reconociendo que la basura electoral no solo contamina visualmente, sino que también contribuye al problema global de la contaminación por plásticos.