La Fiscal General del Estado de Sinaloa, Sara Bruna Quiñonez Estrada, ha reconocido la ausencia de testimonios directos con evidencias fotográficas que validen la liberación de las ocho personas pertenecientes al grupo de 66 reportadas como desaparecidas en Culiacán. Esta declaración contradice las afirmaciones del Secretario de Seguridad Pública del Estado, Gerardo Mérida Sánchez, quien había anunciado previamente la localización de las ocho personas restantes.
Bruna Quiñonez explicó que ninguna de las víctimas ha deseado declarar o proporcionar testimonios, lo que dificulta la verificación de la información. Además, planteó la hipótesis de que algunas de las personas supuestamente liberadas podrían no ser las mismas que fueron secuestradas, sino individuos coaccionados para mentir bajo amenazas o víctimas de incidentes anteriores de privación de la libertad.
Aunque se han identificado a siete de las ocho personas faltantes, la Fiscal General subrayó que tres de ellas no están registradas en la lista original de desaparecidos. Esta situación plantea interrogantes sobre la veracidad de los informes y la complejidad de las investigaciones en curso.