En un acto de violencia que sacudió al municipio de Coahuayana, Michoacán, hombres armados, vinculados con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), lanzaron ataques simultáneos en varias localidades desde la madrugada de este miércoles. La comunidad de Palos Marías y áreas cercanas a la presa fueron los principales escenarios de esta ofensiva.
El grupo delictivo no solo intercambió disparos, sino que también prendió fuego a múltiples vehículos en Palos María, una localidad situada en la región montañosa de la costa michoacana. Esta serie de ataques desató el pánico y el caos entre los habitantes, quienes, en ausencia de una respuesta inmediata por parte de las fuerzas federales de seguridad, se vieron obligados a defender sus hogares y familias.
Horas después del inicio de la violencia, miembros del Ejército y la Guardia Nacional hicieron acto de presencia, pero solo después de que los criminales hubiesen asolado la zona por aproximadamente seis horas, según relató un residente afectado de Coahuayana. Los ataques fueron intensos, utilizando armamento pesado y explosivos lanzados desde drones, situación que dejó a varias familias sin otra opción que el desplazamiento forzado para salvar sus vidas.
Los vecinos del municipio lograron capturar en video algunos de los momentos más críticos del asedio, registrando el sonido ensordecedor de los enfrentamientos. Estos hechos reflejan no solo la audacia y el poderío del CJNG en la región, sino también la vulnerabilidad de las comunidades ante el avance del crimen organizado y la tardía respuesta de las autoridades.
