El viernes, Mike Johnson, el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, adoptó una postura sólida en contra de un acuerdo bipartidista en el Senado que busca combinar medidas de control fronterizo con ayuda a Ucrania. Envió una carta a sus colegas, alineándose con los conservadores más rígidos que están decididos a bloquear este pacto relacionado con la política fronteriza y la inmigración.
Johnson, quien es un republicano de Louisiana, afirmó que la ley habría enfrentado un callejón sin salida en la Cámara Baja si los informes filtrados sobre ella resultaban ser ciertos. Aunque el grupo central de senadores que negocia el acuerdo aún no ha publicado el texto del proyecto de ley, ya ha sido objeto de críticas por parte de los republicanos, incluido Donald Trump, el probable candidato presidencial, quien esta semana lo calificó como un «regalo» político para los demócratas.
En la carta, Johnson señaló que «en lugar de aceptar la responsabilidad, el presidente Biden ahora está tratando de culpar al Congreso por lo que él mismo creó intencionalmente».
Este mensaje se suma a los obstáculos que enfrenta el acuerdo sobre la frontera y Ucrania, cerrando una semana en la que el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, reconoció ante sus colegas que la ley enfrentaba una feroz oposición de Trump que podría obligarlos a buscar otra forma de ayuda para Kiev. Posteriormente, McConnell aclaró que aún respaldaba la combinación de medidas fronterizas con la ayuda a Ucrania, un acuerdo que inicialmente los republicanos del Senado exigieron para obtener su apoyo para financiar la guerra en Ucrania.
Las perspectivas cada vez más sombrías de un acuerdo dejan a los líderes del Congreso sin un camino claro para aprobar la solicitud de la Casa Blanca de 110 mil millones de dólares en fondos de emergencia para Ucrania, Israel, la ley de inmigración y otras necesidades de seguridad nacional. El presidente Joe Biden ha priorizado reforzar la defensa de Kiev contra Rusia, pero su gobierno se ha quedado sin fondos para enviar municiones y misiles. Los partidarios de Ucrania advierten que el estancamiento en el Congreso ya está afectando en el campo de batalla y dejando a los soldados ucranianos en desventaja.
Johnson ya mostraba un profundo escepticismo hacia cualquier compromiso bipartidista sobre política fronteriza, que requiere la aprobación del Senado. El viernes, reiteró su apoyo a un amplio conjunto de medidas de inmigración que la Cámara Baja aprobó el año pasado en respuesta a los desafíos fronterizos del país. Sin embargo, ese proyecto de ley no obtuvo ni un solo voto demócrata en ese momento y prácticamente no tiene posibilidades de conseguir apoyo demócrata ahora.
En un año electoral, los republicanos buscan recordar el hecho de que un número histórico de inmigrantes ha llegado a Estados Unidos durante la presidencia de Biden. Su gobierno ha respondido que la migración está siendo impulsada por problemas globales y ha intentado implementar políticas humanas en materia de vigilancia fronteriza.
