La Suprema Corte de Estados Unidos respaldó este lunes la decisión del gobierno federal de retirar el alambre de púas instalado por las autoridades texanas en la frontera con México, medida tomada para controlar el flujo migratorio. La decisión fue aprobada con cinco votos a favor y cuatro en contra, apoyando la posición de la Administración de Joe Biden.
Esta sentencia se produce en el contexto de las críticas a las políticas antiinmigración impulsadas por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, las cuales han sido objeto de múltiples quejas por parte del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Abbott ha promovido la colocación de barreras flotantes en el río Grande, cerca de Eagle Pass, y ha dado luz verde para que los agentes detengan y encarcelen a miles de inmigrantes acusados de allanamiento. Estas acciones también han sido impugnadas por la administración en los tribunales federales.
Recientemente, un tribunal federal de apelaciones ordenó a los agentes federales cesar el corte de la alambrada. Eagle Pass ha sido un punto clave de cruce para numerosos inmigrantes en los últimos meses.
Según los documentos judiciales, la administración argumentó que el alambre obstaculiza a los agentes de la Patrulla Fronteriza para alcanzar a los migrantes que cruzan el río y que, en definitiva, las leyes federales de inmigración tienen prioridad sobre los esfuerzos individuales de Texas.
Las autoridades texanas han sostenido que los agentes federales cortan la alambrada para facilitar el paso de grupos que cruzan ilegalmente el río, antes de detenerlos para su procesamiento.
El presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, junto con los jueces Amy Coney Barrett, Ketanji Brown Jackson, Elena Kagan y Sonia Sotomayor, se alinearon con la Administración. Por otro lado, los jueces Samuel Alito, Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Clarence Thomas votaron a favor de Texas.