Con menos de 30 años desde su aparición, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) ha anunciado la desaparición de los Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas y las Juntas de Buen Gobierno (JBG), que han sido las instancias donde las bases de esta organización resolvían conflictos, proponían proyectos y realizaban trámites.
En el año 2003, el EZLN estableció los Caracoles zapatistas como sustitutos de los llamados Aguascalientes. El primero de estos Caracoles se instaló en la comunidad de Guadalupe Tepeyac, en el municipio de Las Margaritas, como un tributo al estado donde se redactó la Constitución de 1907. El EZLN utilizó los Aguascalientes para llevar a cabo la Convención Nacional Democrática (CND) en un esfuerzo por impulsar un gobierno de transición y poner fin a la hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en México.
Posteriormente, en la Cuarta Declaración de la Selva Lacandona, el EZLN anunció la apertura de otros cinco Aguascalientes en los municipios de Ocosingo (La Garrucha), San Andrés Larráinzar (Oventic), Altamirano (Morelia), Palenque (Roberto Barrios), y se trasladó el Aguascalientes de Guadalupe Tepeyac a La Realidad, ubicada en el municipio de Las Margaritas, a unos 15 kilómetros de distancia.
Sin embargo, siete años después, estos cambiaron su denominación por la de Caracoles, espacios donde el EZLN realizaba eventos con motivo de su aniversario del alzamiento y donde invitaba a intelectuales de Europa, América, África y Asia a participar en el Encuentro Intercontinental por la Humanidad y contra el Neoliberalismo, que se celebró en los Aguascalientes de La Realidad, Morelia, La Garrucha, Oventic y Roberto Barrios, del 27 de julio al 3 de agosto de 1996.
Los Caracoles operaban en paralelo con los Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas, los cuales ahora permanecerán cerrados hasta nuevo aviso.
Por otro lado, las Juntas de Buen Gobierno desempeñaron un papel crucial como instancias donde los zapatistas resolvían una amplia gama de conflictos, llevaban a cabo trámites, presentaban solicitudes para obtener documentos de identidad, permisos de transporte y otros asuntos.
El EZLN anunció su decisión de poner fin a las Juntas de Buen Gobierno y los Municipios Autónomos Rebeldes, una decisión que planearon hace tres meses y que revelarán en los próximos días, junto con las razones que motivaron esta acción y el nombre por el que se reemplazarán.
A partir de este anuncio, los Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas y las Juntas de Buen Gobierno declararon que «todos los sellos, membretes, cargos, representaciones y acuerdos con el nombre de cualquier MAREZ o cualquiera de las Juntas son inválidos desde este momento».
En consecuencia, los acuerdos previos a esta fecha con organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales, colectivos y grupos de solidaridad en México y en el mundo «permanecerán vigentes hasta su vencimiento, pero no se podrán establecer nuevos acuerdos con estas instancias de autonomía zapatista, ya que simplemente ya no existen».
El comunicado también informa que los Caracoles se mantendrán cerrados al exterior «hasta nuevo aviso». Estos se encuentran en los municipios de Ocosingo (La Garrucha), San Andrés Larráinzar (Oventic), Ocosingo (La Garrucha), Altamirano (Morelia), Palenque (Roberto Barrios) y Las Margaritas (La Realidad).
El EZLN señaló que algunos municipios en Chiapas, como San Cristóbal de las Casas, Comitán, Las Margaritas y Palenque, están bajo control de «sicarios legales o el crimen organizado». Esto ha llevado a la presencia de «bloqueos, secuestros, extorsiones, reclutamiento forzado y tiroteos constantes». El comunicado destaca que la situación es más grave en las comunidades rurales, especialmente en la franja fronteriza con Guatemala.
