La refinería de Dos Bocas presenta retrasos y sobrecostos, incumpliendo las promesas de su inauguración. En una reciente entrevista en el programa Primera Emisión de noticias, el consultor en economía Pedro Tello y el conductor Luis Cárdenas discutieron la situación actual. Se esperaba que a partir del primero de julio de 2023, Dos Bocas comenzara a producir gasolina a bajo costo, reduciendo la dependencia del extranjero y logrando la soberanía energética. Sin embargo, hasta la fecha, ninguno de los objetivos prometidos se ha cumplido. La construcción ha llevado más tiempo del previsto, los costos han aumentado considerablemente y la eficiencia productiva sigue en duda.
A pesar de la inauguración simbólica realizada el año pasado, en la cual se cortó el listón de una planta aún sin terminar, la refinería de Dos Bocas sigue sin producir gasolina. Pedro Tello señaló que la construcción ha experimentado retrasos significativos. Se prometió que tardaría dos años y costaría ocho mil millones de dólares, pero actualmente, después de tres años, el costo estimado se eleva a catorce mil millones de dólares. Esta situación genera preocupación sobre la rentabilidad futura de la planta y el retorno del capital invertido.
Además, se cuestiona la viabilidad de la producción de gasolina a precios más bajos que los de importación. Aunque se aseguró que el costo sería menor, la eficiencia productiva de Dos Bocas es motivo de incertidumbre. Según un documento atribuido a la gerencia de auditoría de Petróleos Mexicanos, aún faltan por concluir plantas de energía eléctrica, cotización retardada, catalítica y procesos de cogeneración e integración. Estos hallazgos sugieren que el arranque propuesto para julio de 2023 es poco factible.
La construcción de la refinería de Dos Bocas ha generado sobrecostos y retrasos, afectando tanto a los contribuyentes como a aquellos que esperan servicios públicos. El costo inicialmente prometido se ha incrementado en un 75%, mientras que los plazos establecidos no se han cumplido. Esta situación plantea preocupaciones sobre la gestión y la toma de decisiones en relación con el proyecto. A pesar de la incertidumbre, se espera que la refinería comience a producir gasolina en algún momento, aunque la fecha precisa aún es incierta.
