Un incendio provocado luego de una riña entre reclusos en la cárcel de la Ciudad Tuluá, Colombia, dejó como saldo al menos 51 personas muertas y 30 heridos. 

El hecho se registró la madrugada en medio de un intento de motín que algunos presos iniciaron para fugarse. En incendio que se propagó en gran parte de la prisión de mediana seguridad. 

El director del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec), Tito Castellanos, detalló que, de acuerdo con un informe preliminar, los fallecidos son internos y entre los heridos hay guardias.

Inicialmente, al entrar la guardia, los internos empiezan a quemar colchonetas sin medir las consecuencias y supuestamente se presenta un incendio en efecto cascada”, comentó.

Castellanos informó que la mayoría de las víctimas murió por inhalación de gases tóxicos.

Además, indicó las autoridades investigan otras hipótesis, como una riña entre internos del penal que se salió de control.

Por su parte, el presidente Iván Duque se solidarizó con las familias de las víctimas, e indicó en su cuenta de Twitter que ha dado instrucciones para “adelantar investigaciones que permitan esclarecer esta terrible situación”.

Gustavo Petro, presidente electo de Colombia, también reaccionó a la noticia, envió sus condolencias a los familiares de las víctimas y advirtió que la tragedia «obliga a un replanteamiento completo de la política carcelaria» en el país.