Libros entrañables para niños: «La Ovejita que vino a cenar» y «El hilo invisible»

Los libros ilustrados “La Ovejita que vino a cenar”, de Steve Smallman y “El hilo invisible”, de Miriam Tirado, son dos grandes opciones para regalar a propósito del festejo del Día del Niño.

En “La Ovejita que vino a cenar” el protagonista es un viejo lobo solitario al que se le antoja un delicioso estofado porque está harto de comer sopa de verduras. De pronto toca a su puerta una ovejita perdida y friolenta y, por supuesto, el primer pensamiento del lobo es comérsela; pero luego lo analiza mejor y se da cuenta de que le puede caer mal al estómago una ovejita con frío, hambre, hipo o sueño.

Y es ahí donde empiezan las aventuras de esos dos entrañables personajes ilustrados por Joelle Dreidemy.

En el caso de “El hilo invisible”, la protagonista es una niña llamada “Nura”, quien le pregunta a su mamá para que sirve el ombligo y ella le responde que es en esa parte del cuerpo donde se guarda el secreto más bonito porque de ahí salen hilos invisibles que nos unen a las personas y animales que queremos (sin importar el tiempo y el espacio).

Esta historia, ilustrada por Marta Moreno, habla de los vínculos afectivos y de que esos hilos invisibles pueden lograr que los niños no se sientan solos, por ejemplo, cuando están tristes y hace hincapié en la importancia de creer en cosas que no se pueden ver ni tocar, como el amor y la amistad.

Por Dalila Carreño