Tras dos años de permanecer cerrada por trabajos de rehabilitación, el gobierno de la Ciudad de México retiró las vallas metálicas que resguardaban el Ángel de la Independencia.
Este lunes, la Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México confirmó que fueron retiradas las vallas metálicas que rodeaban el monumento ya que concluyeron los trabajos de rehabilitación por los daños que sufrió tras los sismos del 2017.
El Ángel de la Independencia sufrió una fractura en el fuste de su columna, además los sismos ocasionaron grietas en el recubrimiento de piedra y desajustes en los sillares y piezas de cantera.
Ahora, el monumento podrá ser visitado por turistas nacionales e internacionales para tomarse fotografías, sin embargo, la zona del mirador seguirá cerrada a todo el público por razones de seguridad y conservación.
El proyecto de restauración fue realizado en colaboración con el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
Con información de El Universal.