El mundo enfrenta «alerta roja» por crisis climática: Biden

President Joe Biden speaks as he tours a neighborhood impacted by flooding from the remnants of Hurricane Ida, Tuesday, Sept. 7, 2021, in the Queens borough of New York. (AP Photo/Evan Vucci)

Tras evaluar los daños causados por el paso del huracán Ida en Nueva York y Nueva Jersey, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó este martes que el mundo enfrenta una «alerta roja» por el peligro del cambio climático.

«Tenemos que escuchar a los científicos, los economistas y los expertos en seguridad nacional. Todos nos dicen que esto es una alerta roja», sostuvo Biden en su discurso.

«La nación y el mundo están en peligro. Eso no es una exageración. Eso es un hecho», aseveró el presidente estadounidense.

Biden señaló que los eventos de clima extremo registrados en Estados Unidos este verano son un presagio de que habrá peores manifestaciones del calentamiento global en un futuro.

“Creo que estamos en uno de esos puntos de inflexión, donde o actuamos o vamos a tener verdaderos problemas; nuestros hijos van a tener graves problemas”, insistió el presidente de Estados Unidos.

«Esta es una crisis de todos», advirtió. «Estos desastres no se detendrán. Solo vendrán con más frecuencia y ferocidad» añadió.

Ante esta situación, Joe Biden, quien impulsa una ley de gasto en infraestructura, que incluye importantes fondos para la economía verde, defendió la necesidad de que Estados Unidos tome medidas decididas e impulse al resto del mundo para hacerlo también.

El mandatario demócrata afirmó que la mejora y el fortalecimiento sistémicos de la infraestructura de la nación es una “necesidad urgente” y destacó los cambios propuestos: centrales eléctricas a prueba de inundaciones, edificios elevados sobre el nivel del suelo y líneas eléctricas subterráneas.

El presidente estadounidense insistió en que su gobierno apoyará económicamente a los damnificados para que puedan contar con alojamiento temporal, reconstruir sus viviendas o hacer frente a las pérdidas provocadas por las inundaciones.

El paso de la tormenta dejó un saldo de al menos 47 personas en el noreste de Estados Unidos, y convirtió las calles de muchas ciudades en ríos embravecidos, inundando sótanos y provocando daños materiales.

Con información de Milenio.