
La canciller alemana, Angela Merkel, pidió este viernes al presidente ruso, Vladimir Putin, la liberación del opositor encarcelado Alexéi Navalni, durante su última visita a Moscú antes de dejar el poder en otoño.
«Le pedí al presidente ruso que libere a Navalni», afirmó Merkel durante su visita al Kremlin.
Por el contrario, el presidente ruso se defendió diciendo que su principal opositor no está detenido «por sus actividades políticas», sino por «una infracción criminal con socios extranjeros».
Tras una convalecencia en Alemania, Alexéi Navalni regresó a Rusia en enero y fue inmediatamente detenido y condenado a dos años y medio de prisión, en un caso de fraude que él considera político.
Alexéi Navalni es conocido, especialmente, por sus investigaciones sobre el tren de vida y la malversación de las élites económicas.
Putin aseguró este viernes que la «lucha contra la corrupción es muy importante» y que Rusia hará «todo» lo posible para erradicarla, además recalcó que «no puede usarse con fines políticos».
La visita de Angela Merkel a Rusia coincide con el primer aniversario del envenenamiento de Alexéi Navalni, que ella atribuye al Kremlin y a los servicios secretos rusos.