El Pentágono reveló que este domingo las fuerzas armadas de Estados Unidos llevaron a cabo ataques aéreos en zonas de Irak y Siria contra milicias respaldadas por Irán, en respuesta a los asaltos con drones de los rebeldes contra efectivos e instalaciones norteamericanas en suelo iraquí.
Por orden del presidente Joe Biden, las fuerzas estadunidenses llevaron a cabo bombardeos defensivos «de precisión» que tuvieron como objetivo instalaciones operativas y de almacenamiento de armas en dos ubicaciones en Siria y una ubicación en Irak, que se encuentran cerca de la frontera entre esos países, detalló el portavoz del Pentágono, John Kirby en un comunicado.
«Como lo demostraron los ataques de esta noche, el presidente Biden ha dejado en claro que actuará para proteger al personal estadounidense«, agregó.
Además, Kirby señaló que esos objetivos fueron seleccionados porque desde esas instalaciones las milicias, entre las que citó las iraquíes Kataeb Hizbulá y Kataeb Said al Shuhadá, lanzan ataques con vehículos aéreos no tripulados contra posiciones y soldados estadounidenses en Irak.
«Dados los continuados ataques por parte de grupos respaldados por Irán contra intereses de Estados Unidos en Irak, el presidente ha ordenado una acción militar para acabar y prevenir tales ataques«, subrayó Kirby.
Asimismo, recordó que las fuerzas estadounidenses están en Irak por invitación del gobierno de Bagdad, para ayudar a derrotar a la organización terrorista Estado Islámico.
Por su parte, este lunes, la agrupación de milicias iraquíes Multitud Popular confirmó que los ataques estadounidenses han dejado al menos cuatro bajas en sus filas. Otras fuentes informaron de siete milicianos muertos, además de un niño sirio.