Pedro Tello, consultor en economía, ha señalado que los productos que más erosionan el poder de compra de los hogares mexicanos son aquellos que conforman la dieta diaria del país, como el pan, la tortilla, el huevo y el pollo. Estos productos han registrado un crecimiento mucho mayor al de la inflación, lo que significa que se necesita cada vez más dinero para comprar la misma cantidad de productos o aceptar que se lleven menos cosas a casa. Aunque la inflación se está desacelerando en todo el país, muchos mexicanos no lo notan al momento de hacer sus compras diarias.
La situación es preocupante, ya que los productos básicos de la dieta mexicana son aquellos que más han subido de precio en los últimos meses, lo que obliga a muchos a renunciar a ciertos productos o cambiarlos por otros de menor calidad. Pedro Tello ha destacado que este problema afecta principalmente a los hogares con menos recursos económicos, ya que deben hacer un mayor esfuerzo para adquirir los productos básicos. Es necesario tomar medidas para proteger el poder adquisitivo de los hogares mexicanos y garantizar el acceso a una dieta adecuada. Algunas de las posibles soluciones podrían incluir políticas públicas para regular los precios de los productos básicos o la promoción de huertos urbanos y comunales.
